Después de Jodie Foster en 2021, el actor ganador del Oscar Forest Whitaker será el invitado de honor en la Ceremonia de Apertura del 75º Festival de Cine de Cannes. Al igual que Jeanne Moreau, Bernardo Bertolucci, Manoel de Oliveira, Jean-Pierre Léaud, Agnès Varda o Alain Delon, recibirá una Palma de Oro honorífica, que premia tanto una brillante carrera artística y una personalidad singular como un compromiso discreto pero asertiva en las grandes acciones humanitarias de nuestro tiempo.
Whitaker
es una leyenda que impresiona. Su destino artístico y su aura se
revelaron plenamente cuando llegó por primera vez al Festival de Cine de Cannes
en 1988, donde encarnó al genio Charlie Parker, un visionario jazzista que
elevó el saxofón a un nuevo nivel de expresión. Clint Eastwood le ofreció entonces su primer
gran papel, aunque ya se había hecho un nombre con Martin Scorsese en El
color del dinero, Oliver Stone en Platoon o Barry Levinson en Good
Morning, Vietnam. A los 27 años recibió el Premio al Mejor Actor por Bird.
El mundo
entero descubre a un actor de una potencia fenomenal, en sintonía con una
sensibilidad que impone innegablemente una forma de gracia, un bloque de
emoción que transmite toda la fragilidad humana en la voz y la mirada. “Al dar
la bienvenida a Forest Whitaker a Cannes, pude conocer y admirar a un artista
con un carisma inmenso y una presencia luminosa”, declaró Thierry Frémaux,
Delegado General.
“Su
filmografía es a la vez deslumbrante y totalmente lograda. También pude
observar de cerca sus convicciones como hombre, la atención que presta a las
generaciones más jóvenes y su fe en un mundo mejor, al que él mismo contribuye
–y en concreto, a través de su compromiso– a mejorar. Raros son los artistas
que encuentran un equilibrio tan hermoso. Forest lo logra y predica con el
ejemplo”.
“Es una
tradición que el Festival de Cine de Cannes honre a quienes han hecho su
historia y Forest Whitaker es uno de ellos”, añade Pierre Lescure, presidente
del Festival de Cine de Cannes. “Es ese joven actor que Clint Eastwood
descubrió en Bird y ese hombre que amplía su visión del mundo para
ofrecérselo a los que sufren ya los que luchan. Todos los honores podrían ir
para Forest Whitaker. Esta Palma de Oro es el testimonio del reconocimiento del
mundo del cine”.
Regresó
seis veces a la Sección Oficial, incluidas cuatro en Competición con: A
Rage in Harlem de Bill Duke, Ladrones de cuerpos de Abel Ferrara
y la inclasificable Ghost Dog: The Way of the Samurai, de Jim Jarmusch, donde encarna
a un melancólico asesino a sueldo que vive según los preceptos del Hagakure, el código de honor de los
samuráis del Japón medieval. Concentrado en poder y flexibilidad, encarna a un
héroe juguetón y meditativo, lleno de fuerzas misteriosas.
The Crying Game, Humo, Habitación del pánico, Juego
del teléfono, El último rey de Escocia (Oscar y
Globo de Oro al mejor actor), Al final de la noche, Rage
in the Belly, Rogue One, Black Panther, The
Butler, Respect: son películas hablan de su eclecticismo y su amor. de
la gran diferencia. Finalmente, debemos mencionar Zulu de Jérôme Salle, que
se proyectó en la Clausura del Festival 2013.
A su
filmografía como actor pronto se unió una labor de director y productor: Forest
Whitaker ha dirigido 4 largometrajes (Strapped, ¿Dónde están los hombres?,
Así
va la vida, Stars Full Eyes) y produjo en particular la sobrecogedora Fruitvale
Station, ópera prima de Ryan Coogler presentada en Un Certain Regard,
la eufórica Dope o más recientemente The Songs My Brothers Taught Me de
Chloé Zhao.
Pero
esta brillante carrera artística no puede resumir solo a Forest Whitaker. Porque,
a sus ojos, ser una estrella de cine no es suficiente y su carrera resuena
fuertemente con sus compromisos humanitarios. En 2012, el actor fundó Whitaker Peace &
Development Initiative (WPDI), una ONG que opera en Uganda, Sudán del Sur,
México, Sudáfrica, Camerún, Chad y Gabón e incluso en Los Ángeles. Trabajando
por la paz y la resiliencia económica en territorios marcados por el conflicto
armado y la violencia, WPDI ha llegado, en 10 años, a más de un millón y medio
de personas, gracias a una red de más de 2500 jóvenes líderes y 14 centros de
aprendizaje. Enviado especial de la UNESCO para la paz y la reconciliación,
Forest Whitaker es miembro del grupo de defensa de los Objetivos de Desarrollo
Sostenible en las Naciones Unidas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario