La directora y guionista italiana Alice Rohrwacher ha sido elegida para presidir el Jurado de la Caméra d'or. Este premio reconoce una ópera prima presentada en la Selección Oficial, la Semana de la Crítica o la Quincena de los Realizadores, en el Festival de Cannes.
Alice Rohrwacher, cuyo delicado trabajo floreció en Cannes, reconocerá a su vez
el debut de un cineasta en la Ceremonia de Clausura del 78.º Festival de
Cannes, el sábado 24 de mayo.
«Las
primeras veces siempre son importantes y nos acompañan toda la vida», dijo
Alice Rohrwacher. «Como entrar en una habitación desconocida, acercarse a la
persona amada para un primer beso o llegar a una costa extranjera. Hay algo
dorado que envuelve estos momentos en nuestra memoria. ¿Será por eso que el
premio más prestigioso para óperas primas se llama Caméra d'or?»
En una
filmografía que abarca cortometrajes y largometrajes, documentales y ficción,
Alice Rohrwacher plasma con sutileza el brillo dorado de los comienzos y el
resplandor de las primeras veces. Figura del nuevo cine italiano, reconcilia el
naturalismo de De Sica y la visión onírica de Fellini en películas que siempre
se mueven entre la narrativa y el documental.
En su
primer largometraje, Corpo Celeste, presentado en la Quincena de Realizadores
en 2011, Alice Rohrwacher exploró una relación con el mundo hecho de
descubrimientos y comienzos a través del retrato de una niña de trece años. Su
segundo largometraje, La maravilla, fue seleccionado para competir en el
Festival de Cannes de 2014 y ganó el Gran Premio. Este relato personal evoca la
vida cotidiana de unas jóvenes hermanas en una granja aislada, y la sociedad
moderna que las alcanza con la filmación de un reality show. Con Lazzaro
felice, continúa investigando un ideal de inocencia perpetuamente plagado de
corrupción moral: repentinamente liberado del yugo de un terrateniente que
mantenía a los campesinos en servidumbre, Lazzaro se enfrenta a la violencia de
la ciudad. Presentado en Competición en Cannes en 2018, empató por el premio al
Mejor Guion, coronando el singular talento de escritura de Alice Rohrwacher. La
Chimera, considerada por la directora como la conclusión de una trilogía
formada con sus dos largometrajes anteriores, también se presentó en
Competición en el Festival de Cannes en 2023. Con el tráfico de antigüedades
como telón de fondo y una parábola sobre nuestra relación con el pasado, la
película disecciona la forma en que los orígenes configuran nuestra conexión
con los demás, con la vida y con el mundo.
La
fascinante obra de Alice Rohrwacher, impregnada de su propio realismo mágico,
no se limita a estos cuatro largometrajes. El documental, el primer género que
retomó al participar en películas colectivas, le permitió explorar la poesía
del mundo rural, la importancia del pasado y la emoción de la juventud
(Checosamanca, 2006; 9x10 Novanta, 2014; Futura, 2021). Los cortometrajes,
a los que regresa con frecuencia, son un espacio de expresión que reinventa
constantemente.
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