En la
mayoría de los países del planeta, el fútbol es una pasión nacional que desata
las más encendidas discusiones y que, en más de una ocasión, también ha
inspirado numerosas películas.
Como
estamos en la fiebre de la Copa del Mundo 2022 de la FIFA, la ocasión es
propicia para recordar algunos de los filmes que tienen al fútbol como
escenario de sus personajes.
Comencemos
con Metegol (2013), el magnífico filme de animación de Juan
José Campanella, que, en su natal Argentina, le valió el elogio de la crítica y
el apoyo masivo del público: es la mágica historia de Amadeo, un chico
tímido y virtuoso que tendrá que enfrentarse a El Crack, un terrible rival
sobre el terreno de juego.
En ¡Goool! (2005,
Danny Cannon) Kuno Becker tiene que ir a probar su talento al equipo Newcastle
United. En el filme aparecen algunas estrellas: David Beckham, Zinédine Zidane,
Sven Goran Eriksson y Brian Johnson. El filme tuvo hasta su secuela con ¡Goool
2!: viviendo el sueño (2007, Jaume Collet-Serra), un poco más de
lo mismo y más estrellas: Iker Casillas, Sergio Ramos, Roberto Carlos.
Maradona: la mano de Dios (2007, Marco Risi), protagonizada por el
italiano Marco Leonardi (el galán de Como agua para chocolate) retrata la
vida del astro argentino Diego Armando Maradona, desde su pobre infancia hasta
los excesos que trae consigo el éxito, mezclando imágenes reales de algunos
partidos con otras de ficción.
Fuera de juego (2006, Jafar Panahi) es una poderosa denuncia sobre las
condiciones de las mujeres en Irán: pueden simpatizar por el equipo iraní, pero
no se les permite asistir al estadio. La peor tortura: apresarlas si intentan
colarse disfrazadas de varones y detenerlas en donde sólo puedan escuchar los
gritos de los fanáticos.
La
mexicana Rudo y Cursi (2008, Carlos Cuarón) aborda la historia de
los dos hermanos del título (Diego Luna y Gael García Bernal, nada menos) y
cómo en México el fútbol es una de las herramientas para escalar socialmente. Uno
de los filmes que más habla de fútbol y de la vida, sin mostrar tanta cancha.
Brasil,
como era de esperarse, ha aportado variados títulos, desde comedias tipo Romeo
y Julieta se casan (2005, Bruno Barreto): ellos se aman, pero ella
es fanática del Palmeiras y él del Corinthias. En Río de Janeiro, eso se llama
tragedia. También filmes como Heleno (2011, José Henrique
Fonseca), aproximación a la vida de Heleno de Freitas, el primer jugador de
Brasil con aires de movie star, protagonizada por Rodrigo Santoro.
Hace un
par de años, el filme Hermano, dirigido por Marcel
Rasquin, se convertía en una denuncia sobre las condiciones de pobreza en
Venezuela y las aspiraciones de dos hermanos de romper su círculo de miseria
por medio del fútbol. El filme ganó como Mejor Película en el Festival Fine
Arts de Santo Domingo.
Este
mismo año, Marcos Carnevale (el mismo de Elsa y Fred y Tocar el cielo) estrenó El
Fútbol o yo, una comedia protagonizada por Adrián Suar y Julieta Díaz, como una pareja con serios problemas por la
adicción del varón hacia el deporte, situación que se le hace insostenible a su
mujer.
España
también tiene su cuota de filmes futboleros, desde una comedia clásica
como Once pares de botas (1954, Rovira Beleta) en la que narra
la difícil elección que tiene que plantearse un futbolista aspirante al éxito
con una legión de fans femeninas que despiertan los celos de su novia. En el
filme aparece la estrella Di Stefano.
Pero también
dramas tan serios como El portero (2000, Gonzalo
Suárez) en que, con la Guerra Civil de escenario, en un pequeño pueblo de
Asturias se juegan el todo por el todo a los penales.
Un par
de títulos que no pueden faltan en esta reseña: Evasión o victoria (1981,
John Huston), filme que recuerdo por la presencia del Rey Pelé y que
protagonizaban: Sylvester Stallone, Michael Caine y Max Von Sydow.
También The Game of Their Lives (2005, David Anspaugh)
protagonizado por Gerard Butler, la increíble historia del equipo de E.E.U.U.
que, en el Mundial de Fútbol de 1950 (el del “Maracanazo”), derrotó 1-0 a
la selección de Inglaterra.
Olvidados
están filmes como: El mundial olvidado (2011, Lorenzo
Garzella y Filippo Macelloni), una película que reconstruye la historia del
mundial jugado en la Patagonia en 1942 y que jamás fue reconocido por los
organismos oficiales del fútbol, Maradona by Kusturica (2008),
documental del serbio Emir Kusturica sobre quien, para muchos, es el mejor
jugador del mundo y The Damned United (2009, Tom
Hooper) una película que, en clave de humor negro que recorre la polémica
trayectoria de los 44 días de Brian Clough como entrenador del Leeds
United, uno de los mejores clubes del mundo por aquel entonces.
Un
listado más flexible permitiría incluir: Quiero ser como Beckham (2002,
Gurinder Chadha) y Días de fútbol (2003, David
Serrano), pero la verdad es que también hay dedicarle tiempo a los partidos de
la Copa del Mundo 2022.
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