Nolan y otros directores piden ayuda para los cines.

El coronavirus ha causado estragos en la industria cinematográfica. La recaudación ha bajado, las películas se retrasan y cientos de miles de empleos se han destruido por los aplazamientos de rodajes, la falta de dinero o el cierre masivo de cines y multisalas. En este escenario, más de 40 artistas y directores, como Christopher Nolan (TENET), Ridley Scott (Gladiador) y Steve McQueen (12 años de esclavitud) han escrito al ministro de Hacienda del Reino Unido, Rishi Sunak, solicitando más apoyo para el hundido sector cinematográfico.

La carta, que se ha publicado el periódico Sunday Times, es un nuevo movimiento de la campaña iniciada el pasado diciembre Keep the Magic Alive, una maniobra de la U.K. Cinema Association que busca gestionar y reconocer los esfuerzos del gobierno del Reino Unido para ayudar a los cines a mantenerse a flote. Sin embargo, muchos responsables dudan de la viabilidad de estas ayudas y maniobras económicas.

Los firmantes de esta petición también incluyen al director de Maradona, Asif Kapadia, al cineasta de Slumdog Millionaire, Danny Boyle, a la productora de James Bond, Barbara Broccoli, y al productor de Harry Potter, David Heyman. “No hay duda de que si se le apoya para sobrevivir, el sector se recuperará y volverá a prosperar. Pero la necesidad de apoyo financiero directo es urgente”, remarca la misiva.

“Reconocemos el apoyo que el gobierno ya ha podido brindar. Pero tememos que esto no sea suficiente, ya que los desafíos son más críticas para los operadores de cines más grandes que no han podido acceder a una financiación personalizada”, confirman.

De hecho, en Reino Unido se encuentran algunas de las principales multisalas y cadenas cinematográficas, representando gran parte de un sector moribundo por los cierres constantes debidos al coronavirus y la falta de grandes estrenos.

“Estas empresas representan más del 80% del mercado, constituyendo en muchos sentidos su 'masa crítica' y están ligados al éxito debido a su gran unión a sectores asociados como la distribución y la producción de películas. Sin ellos, el futuro de toda la industria cinematográfica del Reino Unido se vería extremadamente precario”, argumentan. Si bien en todo el mundo se viven situaciones precarias o muy tristes en el sector de la exhibición, en Reino Unido, debido a los constantes confinamientos causados ​​por la pandemia de coronavirus en curso, los cines en todo el Reino Unido permanecieron cerrados durante la mayor parte de 2020 y continuarán cerrados durante el nuevo año. Si bien muchas salas pequeñas han salido adelante, podrían conservarse, las grandes franquicias como Cineworld, Odeon y Vue aún no han recibido ningún apoyo financiero a medida por parte del gobierno.

“El cine se encuentra al borde de un abismo. Necesitamos con urgencia apoyo financiero específico para garantizar que las generaciones futuras puedan disfrutar de la magia del cine”, concluye la carta firmada por los cineastas.