lunes, febrero 19, 2007

Premios de la Academia: infiltrados en la Babel, una Reina y el último Rey

Todo aquel que ejerce públicamente el triste oficio de la crítica de cine, tiene para estas fechas un compromiso ineludible: la entrega del Premio de la Academia de Hollywood (así es como quieren que llamen al Oscar).
La primera actitud era despotricar contra esa premiación porque, en varias ocasiones, las que se consideraban las mejores producciones del año ni siquiera estaban nominadas. Con mucho veneno, quien suscribe siempre esgrimía amenazante la larga lista de nombres fundamentales del cine (por ejemplo, Charles Chaplin) que nunca ganaron el Oscar.
Al cabo de los años (y mucha rabia consumida) he evolucionado a un estado de Deja Vu (por favor, no me recuerden el clavo con ese título): si es una fiesta del (negocio del) cine, gocemos la fiesta.
El Oscar es cada vez más predecible. A pesar de que en la entrega del pasado año, la Academia de Hollywood, en un gesto ultraconservador, sorprendió prefiriendo la excelente Crash a la gran favorita Brokeback Mountain.
Se hacen pronósticos de todo tipo. Se tejen conjeturas. También se hacen apuestas (sobre todo en Las Vegas).
Siempre que hablo de este premio puntualizo mucho su naturaleza: el Oscar es un premio gremial, es decir, lo entregan los artistas directamente vinculados al mundo del cine: actores, actrices, directores, técnicos y un largo etcétera.
Por eso, hay que ver el Oscar como la culminación de un formidable proceso de mercadotecnia (incluidas costosas campañas de promoción y mucho cabildeo) y no necesariamente el reconocimiento a lo mejor del año.
Así, mis pronósticos siempre han girado en torno a lo que creo que va a ganar y no lo que quisiera que ganara.
Mejor Actor y Actriz de Reparto: Eddie Murphy y Jennifer Hudson, ambos por Dreamgirls, la película con mayor número de nominaciones, pero dejada fuera de las categorías más importantes.
Mejor Actor: Forrest Whitaker por The Last King of Scotland.
Mejor Actriz: Helen Mirren por The Queen. Ella ha Ganado todos los premios entregados hasta la fecha.
Mejor Director: Martin Scorsese por Infiltrados. POR FIN, Maestro.
Mejor Película Animada: Cars.
Mejor Película: Babel, aunque quisiéramos equivocarnos y que sea seleccionada Pequeña Miss Sunshine, esa joyita del cine independiente que vuelve a demostrar que talento puede más que dinero.
De cualquier forma, el próximo domingo 25 de febrero, se celebra la fiesta más glamorosa del cine mundial, la entrega del Premio de la Academia, y la ocasión es propicia para brindar por el arte de nuestras pasiones.

miércoles, enero 31, 2007

Las divertidas aventuras de un Sanky Panky

Lo peor que se puede decir de Sanky Panky es que funciona como excusa argumental para el lucimiento del catálogo de cantantes de la empresa productora.
Lo mejor que se puede decir de Sanky Panky es que entretiene: en efecto, el público ríe durante la proyección y ese es el primer objetivo de cualquier comedia.
Lo mejor que puede aportar Sanky Panky al cine dominicano es reconciliar las expectativas del público (el soberano, el que compra la taquilla) con las producciones criollas, relación muy maltrecha después que el pasado año se sentara un insólito precedente de fracasos. Es necesario sintonizar con lo que el público está dispuesto a consumir.
Sanky Panky se sirve de lo más seguro: comediantes más o menos conocidos en la televisión, cantantes populares y una gringa confundida, todos enmarcados en el paradisíaco escenario natural del este del país, resaltado por la excelente fotografía de Elías Acosta.
A medio camino entre la colección de videoclips y el infocomercial de una cadena de hoteles, Sanky Panky logra su cometido: el público la pasa muy bien.
El elenco hace un poco más de lo mismo que hace en la televisión y, en el caso de Tony Pascual, sobreactúa, atropella los diálogos, termina robándose escenas. Brilla con luz intermitente Alina Vargas: tiene futuro en la actuación. Si tan sólo renunciara mínimamente a sus magníficos atributos físicos, que los tiene.
José Enrique Pintor ya mostró credenciales en el drama social con La cárcel de La Victoria (2004) y con Sanky Panky, se confirma como realizador exitoso. Aunque, de vez en cuando, cometa el desliz de permitir que su Sanky Panky entre en crisis existencial y cuestione su mundo, cualidad muy fuera del rango de su personaje y del alcance del comediante Fausto Mata.
Pero, por encima de sus deficiencias, Sanky Panky merece el apoyo de todos: es otro peldaño en el camino que nos conducirá a un auténtico cine dominicano.

martes, enero 23, 2007

Pequeña Miss Sunshine: América es una niña que sueña


“Hay dos clases de personas en el mundo: los ganadores y los perdedores. Los ganadores son los que no se dan por vencido”. Con estas sabias palabras inicia Pequeña Miss Sunshine, película dirigida por Jonathan Dayton y Valerie Faris, que deslumbró la audiencia del Festival del Sundance 2006, ha conseguido su nominación al Oscar y acaba de ser proclamada Película del Año por la PGA (Producers Guild of America).
Me gusta el llamado Cine Independiente de USA. Ese cine hecho al margen de los obscenos presupuestos de Hollywood, pero también al margen de la limitante visión de los magnates cinematográficos, de la mutilación impuesta a las ideas muy atrevidas y hasta de los caprichos de las superestrellas.
Pequeña Miss Sunshine es un perfecto ejemplo de lo que es una road movie, una película de carreteras.
En los mejores títulos del género, siempre se trata de dos viajes: los personajes realizan un viaje físico: para el caso desde New México hasta California, unos 1,300 kilómetros. Pero también hay un viaje interior de los personajes, quienes evolucionan hacia nuevos estadios de conciencia con respecto a quiénes son o cuáles son sus posibilidades de triunfo.
A la definición de sus personalidades contribuyen notablemente los obstáculos que encuentran en el camino de liberación de sus demonios particulares.
La dosis de humor negro que contiene Pequeña Miss Sunshine permite, no sólo el análisis crítico de varias abstractas instituciones americanas (el éxito profesional, los concursos de belleza, la preparación intelectual), sino también el cuestionamiento de la familia disfuncional que guarda las apariencias.
Todos estos aciertos se ven coronados por un extraordinario elenco conformado por: Grez Kinnear, Toni Collette, Steve Carell, Paul Dano, Alan Arkin y la niña sensación Abigail Breslin, quien, merecidamente ya obtuvo el Premio de la Crítica como Actriz Revelación.
De seguro, Pequeña Miss Sunshine figurará entre los mejores estrenos del 2007 en Dominicana.

viernes, enero 12, 2007

Rompiendo el hielo con Happy Feet

Siempre he sostenido la tesis de que los dibujos animados en realidad están pensados para el disfrute de los adultos. Desde la época del Disney añorado, pasando por el renacimiento de la Factoría con el lanzamiento de La Sirenita (1989) hasta los nuevos tiempos de la animación por computadoras que, contrario a lo que pensaron algunos, ha revitalizado el género de la animación y conseguido los nuevos adeptos que le hacían falta.
Las nuevas producciones de dibujos animados son un caso excepcional de mercadotecnia: a pesar de que insisten en destacar elementos de atractivo para los más viejitos, gustan a los no viejitos y varias se han convertido en auténticos éxitos de taquilla, hasta el punto que han transformado el monto de las inversiones que se hacen para lograr un largometraje generado por computadora. Imagínense sólo lo invertido en el elenco que presta las voces: Nicole Kidman, Robin Williams, Hugh Hackman, Elijah Wood, Brittany Murphy y Hugo Weaving, todos bajo el amable látigo de George Miller.
Pongo por ejemplo Happy Feet, refrescante estreno de inicios de año que, al momento de escribir esta nota, lleva unos $ 179 en la taquilla de E.E.U.U. y cuya base musical se alimenta de temas de Queen y Chicago, todos ajenos (y suponía que desconocidos) para los menores de 15 años. Para mi sorpresa, escuché un coro de voces infantiles en la sala cantar al compás de Please, don’t go.
Hace unos años me sorprendió el éxito de Shrek 2 (2004) por la abundante cantidad de referencias cinematográficas que contenía (que uno supone se presta para el disfrute de los cinéfilos de larga data) y como era disfrutada por los niños.
Y no todo es pura mercadotecnia: ví hace más de un año el teaser de Happy Feet al inicio del excelente documental La marcha de los pingüinos. También hay mucho ingenio y mucho humor contenido en este filme, al margen de que también nos reconcilia con los musicales de antaño.
Precisamente, Happy Feet viene a ser una combinación de La marcha con Moulin Rouge (no es casual la presencia de Nicole Kidman en el elenco). Del primero toma la base central de la narración, es decir, el proceso evolutivo del Pingüino Emperador; y del segundo, el excelente uso de éxitos del cancionero popular de los años 80, integrados al proceso narrativo.
El resultado no puede ser más agradable, mensaje ecológico incluído.
Si ha perdido el contacto con su niño interior, este es el momento para reanudar esa siempre saludable relación. Si sigue siendo un niño, ya seguramente vió Happy Feet y sólo espera la feliz oportunidad de repetirla, porque hasta repetición merece.

martes, enero 02, 2007

Lo mejor del 2006 en Santiago

La verdad es que, en términos cinematográficos, el pasado 2006 fue un año bastante flojo para Santiago. Tanto en la cantidad como en la calidad de las películas estrenadas.
No recuerdo la última vez que la película ganadora del Oscar (con todo el potencial comercial que tiene) no fuera estrenada en los cines de la ciudad. En efecto, Crash sólo pudo verse gracias a las tiendas de alquiler. Pero lo mismo pasó con Brokeback Mountain y Capote, que también disfrutaron de muchísima publicidad porque eran candidatas al Premio de la Academia.
El cine dominicano presentó 5 títulos: Un macho de mujer, Lilís, Viajeros, La tragedia Llenas y El sistema. De ellas sólo la primera contó con el respaldo del público. También fue estrenada con muy poca promoción Ruido, dirigida por el dominicano César Rodríguez.
Así las cosas, nos queda muy limitado el campo para seleccionar los mejores estrenos del 2006.
Creo que la mejor película presentada en Santiago fue Volver, la joya más reciente del español Pedro Almodóvar, con una actuación extraordinaria de Penélope Cruz.
Todavía en cartelera, pueden disfrutar de Infiltrados, el nuevo filme del Maestro Martin Scorsese, un filme que, pronosticamos, se llevará varios de los premios de la temporada. Y ya va siendo hora de que el Oscar se honre cayendo en las manos de Scorsese.
Otros estrenos que merecen considerarse entre los mejores son: La marcha de los pingüinos, el extraordinario documental de Luc Jacquet; Munich, filme dirigido por un cada vez más visceral Steven Spielberg; En la cuerda floja, biografía de Johnny Cash dirigida por James Mangold y El jardinero fiel, del brasileño Fernando Meirelles.
Más recientemente vimos a: Asesino a sueldo, fina obra artesanal de Paul McGuigan; United 93, eficiente filme de Paul Greengrass que también recibirá mucha atención en los próximos días; y Crónica de una fuga, película del uruguayo Adrián Caetano.
También es justo mencionar a: Syriana de Stephen Gaghan, La señora Henderson presenta de Stephen Frears y Lady in water de M. Night Shymalan.
Si me lo preguntan, sigo contestando que ser crítico de cine es uno de los oficios más tristes del mundo.

jueves, diciembre 28, 2006

Craig, Daniel Craig es el nuevo James Bond



Al inicio, pensé que me había equivocado de película y había entrado a El hombre araña. Al final pensé que estaba viendo Titanic. En algún momento, el famoso (y remozado) tema musical de John Barry me trajo de vuelta al mundo del super agente más famoso del cine: James Bond.
La película Casino Royale, dirigida por Martin Campbell, un veterano de la serie del agente 007, es la carta de presentación para Craig, Daniel Craig.
Daniel Craig es el primer actor menor de 40 años en encarnar a Bond, desde que George Lazenby lo hizo en Al servicio secreto de su majestad (1969). Es el sexto en la lista de actores que se han puesto este esmoquin: el primero (y el mejor) Sean Connery, al que siguieron Roger Moore, Timothy Dalton y Pierce Brosnan.
Martin Campbell tiene el mérito de haber rejuvenecido la franquicia de James Bond cuando dirigió GoldenEye (1995), filme que recaudó más de $350 millones en taquilla. Al momento de escribir esta nota, Casino Royale tiene $140 millones y va por buen camino porque los cinéfilos de USA la han elegido “la mejor película de acción del año”.
Casino Royale es el título de la primera novela de Ian Flemming sobre el personaje James Bond, y ciertamente, no será la última de sus películas. Curiosamente, es también el título de una parodia a la novela que realizaran John Huston y Ken Hughes en 1967. Ahí descubrí a Woody Allen, mi genio favorito.
Esta nueva versión sirve para que los fanáticos de todo el mundo renueven sus simpatías con el personaje y para que la generación Y se interese en él (nótese la juventud de Eva Green, la nueva chica Bond). En más de un sentido, Casino Royale es una vuelta a las raíces de James Bond.
Y, por supuesto, también cometen una que otra temeridad: no sólo nos presentan al agente 007 con una (casi insoportable) carga de arrogancia de machista autosuficiente, abandonando todo el rastro del charm de los últimos años, sino que sale del mar como Ursula Andrews en Dr. No (1962).

jueves, diciembre 14, 2006

Infiltrados, lo nuevo del Maestro Martin Scorsese


Cada película de Martin Scorsese es una radiografía del lado oscuro del alma americana, esa alma que rebosa de violencia apenas contenida, esa alma que sufre los embates del más profundo complejo de culpa, esa alma que no termina de redimir sus penas con los axiomas de la religión, ni con las píldoras de Freud.
Martin Scorsese es, sin duda, el director de cine contemporáneo que más conoce de cine clásico, que ha bebido de la fuente de los grandes maestros para conformar una personalidad propia, única en el panorama de Estados Unidos. Pongo por ejemplo su formidable uso del recurso de la vuelta de tuerca para el desenlace de Infiltrados. Es por eso que merece el calificativo de Maestro.
Uno de los aspectos que más llama la atención en el cine de Scorsese es la vulnerabilidad del carácter de sus personajes, siempre atribulados por su pasado, siempre en el inconcluso proceso de purificación de sus pecados, esa pesada carga que todos llevamos colgada del cuello y nos arrastra al abismo.
El cine de Scorsese nos redescubre la realidad que se esconde detrás de las apariencias y nos pone de frente a la brutalidad de los sueños truncos, de la imposibilidad de superarnos de nuestras limitantes, ese círculo vicioso en que el destino nos encierra desde antes del pecado original.
El cine de Scorsese no es una panacea, no ofrece respuestas, sólo cuestiona. Cuestiona hasta nuestra escala de valores morales, éticos, religiosos y nos deja sumidos, como sus personajes, en el vértigo de la confusión, empapados en lágrimas y sangre, desgarrados, derrotados por las ganas de caer.
No quiero dejar de mencionar uno de los mejores aciertos de la película: el extraordinario reparto de bad boys (y una chica confundida, por supuesto): Mark Wahlberg, Matt Damon, Martin Sheen, Alec Baldwin, Leonardo DiCaprio y el mismísimo fundador del concepto: Jack Nicholson. Sólo faltó Robert De Niro, ¿dónde estabas, Bobby?.
Por cierto, Infiltrados pasará a la historia como el filme en que Nicholson entregó el cetro de chico malo a su más digno heredero: Leonardo DiCaprio, así como en El Padrino, Marlon Brando abdicaba el trono a favor de Al Pacino.

miércoles, diciembre 06, 2006

El excelente Asesino a sueldo de Paul McGuigan


Una buena película de acción y suspenso es aquella que nos propone una historia interactiva, es decir, usted debe permanecer a la caza de pistas luego de pagar por la boleta de entrada, elaborar toda una serie de teorías que explican el comportamiento de los personajes o la ocurrencia de algunos hechos y, finalmente, descubrir que está completamente equivocado.
Si un director logra convencerlo de su lógica ridícula, entonces estamos frente a un buen libreto. Insisto, el guión, la forma en que se nos cuenta una película es fundamental a la hora de calificar su calidad narrativa. Asesino a sueldo, dirigida por Paul McGuidan es una excelente muestra.
Algunos entendidos han ligado el estilo de McGuigan en esta película con el de Quentin Tarantino. Creo que le debe mucho más a Guy Ritchie. Al menos, al Guy Ritchie de Lock, Stock and Two Smoking Barrels y Snatch, el Guy Ritchie ingenioso, el de antes que Madonna le succionara los sesos.
Al margen de que plantea más de una curiosidad cinematográfica, verbigracia, las referencias a James Bond. A propósito: es una broma muy pesada esa de que Timothy Dalton es el mejor Bond. Incluso, evidencia la fragilidad de la relación en que están los amantes que coinciden en ese punto.
También se hace referencia a North by Northwest (1959). Curiosamente, este clásico de Alfred Hitchcock se trata de un ejecutivo de publicidad (encarnado por Cary Grant) que es confundido como espía y es ayudado por una bella rubia (encarnada por Eva Marie Saint, ese difícil nombre de recordar)… algo parecido ocurre con nuestro Slevin.
Para los que no les importe mucho las referencias cinematográficas, disfruten de las más que aceptables actuaciones de Josh Harnett (quien fue compañero de habitación del director, cuando ambos eran indocumentados y soñadores y ya le protagonizó Wicker Park), Bruce Willis y Luci Liu.
No se la pierdan. Asesino a sueldo es uno de los mejores estrenos del 2006.

lunes, diciembre 04, 2006

Premios Europeos de Cine 2006


Pedro Almodóvar ha obtenido el premio al mejor director 2006 de la Academia del Cine Europeo por la película 'Volver'. Penélope Cruz ha recibido el galardón a la mejor actriz por su trabajo en el mismo filme, que además ha ganado el premio que concede el público. "Dedico este premio a las maravillosas actrices de mi película", dijo Almodóvar al recoger su galardón, arropado por la espléndida sonrisa desde la sala de Cruz, quien acaparó los flashes de los reporteros desde que compareció sobre la alfombra roja.Asimismo, Alberto Iglesias ha sido distinguido como mejor compositor del año y José Luis Alcaine como mejor director de fotografía, ambos también por su trabajo en 'Volver'. En cuanto al premio más importante, el de mejor película 2006, ha recaído en la cinta alemana 'Das Leben der Anderen', de Florian Henckel von Donnersmarck. 'Volver' aspiraba a seis de las 15 distinciones de la Academia: mejor película, mejor actriz -Cruz-, mejor director y mejor guión -Pedro Almodóvar-, mejor compositor -Alberto Iglesias- y mejor director de fotografía -José Luis Alcaine-. 18 años después de que 'Mujeres al borde de un ataque de nervios' se llevara el premio al cine "joven", en la primera edición de los premios de 1988, Almodóvar desfiló con parte de su equipo, incluida Penélope Cruz, entre los ilustres invitados de la gala, que este año se ha celebrado en Varsovia.

lunes, noviembre 27, 2006

Robert Altman por Robert Altman


(Comparto con todos un escrito del propio Robert Altman. Un Maestro del Cine y de la Palabra)

Nunca supe lo que quería filmar, excepto que era algo que no había visto antes.
Las palabras no te dicen lo que la gente está pensando. Rara vez usamos palabras para decir algo realmente. Usamos las palabras para vender algo o para convencer a la gente o hacer que nos admiren. Es todo un disfraz... Es todo ocultamiento, un lenguaje secreto.
La sabiduría y el amor no tienen nada que ver uno con otro. La sabiduría es permanecer vivo, la supervivencia. Uno es sabio si no mete los dedos en el enchufe. El amor: uno mete los dedos en cualquier cosa.
Me encanta pescar. Uno arroja esa línea al agua y no sabe qué hay en el otro extremo. Tu imaginación está allí abajo.
La peor trampa en la que uno puede caer es empezar a imitarse a uno mismo.
Ha habido unas pocas veces en las que he pensado: "Dios, no creo que haya una verdadera salida a esto; simplemente hay que terminarlo y salir con dignidad".
Me encantan los dramas radiales. Cada persona de la audiencia tenía su propia imagen. Cuando la puerta chirriaba, cada cual tenía su propia puerta.
Cuando alguien pide un consejo, lo que realmente está pidiendo es ayuda.
Te voy a dar el mismo consejo que les doy a mis hijos: nunca aceptes el consejo de nadie.
Uno no puede saberlo todo. El tiempo no alcanza.
Fui piloto. Volé un B-24 en el Pacífico Sur. Hice cuarenta y seis misiones, o algo así. Nos dispararon muchas veces. Era bastante temible, pero uno es tan joven... Yo tenía 19, 20. Y era todo por las chicas.
El jazz ha perdurado porque no tiene principio ni final. Es un momento.
Las primeras películas que vi me hacían sentir que no eran tan sólo películas. Recuerdo la tarde, tras la guerra, en que fui a ver solo Breve encuentro, de David Lean. Y recuerdo estar pensando: "¿Por qué estoy viendo esta película tonta? Ella no es muy linda. ¡Dios! ¡Los zapatos!". Pero veinte minutos más tarde estaba ahí sentado, con lágrimas rodando por mis mejillas y enamorado de Celia Johnson, esta chica con los zapatos sensibles...
Cada nueva película es una experiencia enteramente nueva, estoy haciendo un nuevo bebé. Y uno tiende a amar más a sus hijos menos exitosos. Dígame cuál de mis películas le gusta menos, y yo probablemente le diré que ése es el film que más me gusta.
Amo a los actores porque no entiendo cómo es que pueden hacer lo que hacen, no entiendo el proceso. Siempre me asombra; creo que son criaturas increíbles. Yo no podría pronunciar una frase ni aunque tuviera ocho semanas de ensayo, me paralizaría. Pero el cine es un medio de los actores; ellos son los que se paran ahí, desnudos. No yo. Hablamos sobre los guionistas y los directores, pero no es correcto.
Nunca armo el reparto de una película como lo hacen los estudios. Ellos toman a dos personas que se odian mutuamente, y les pagan suficiente dinero para juntarlas. Pero en verdad nunca se relacionan entre ellas. Yo no tengo tanto dinero. Así que los actores con los que trabajo quieren hacerlo. Para eso se han convertido en actores originariamente: para crear. Y yo les permito hacerlo. Les digo: creen, muéstrenme lo que pueden hacer.
En una época había hecho seis o siete películas y estaba muy orgulloso porque creía que ninguno de esos filmes se parecían entre ellos, que eran diferentes, que no me repetía y que no había manera de saber de quién eran esos filmes salvo porque mi nombre aparecía en pantalla. Pero luego, diez, doce películas más y ya pensaba: son todos capítulos del mismo libro, uno realmente no puede escapar ni evitar dejar sus huellas por todos lados.
He vuelto a ver MASH y Nashville hace poco, y todavía creo que están muy bien. Así que no he mejorado en nada. No voy a mejorar. Me he vuelto más fluido, más eficiente, aprendí a hacer las cosas y a lograr lo que quiero con menos esfuerzo. Pero ahí también hay un gran riesgo: si uno se vuelve menos esforzado, pierde el arte.
Los premios y las estatuillas sirven como credenciales. Pero es como todo lo demás; duran tanto como un beso.
Es muy raro. Estamos dispuestos a aceptar cualquier cosa, absolutamente cualquier cosa en la vida real. Pero les exigimos orden a nuestras fantasías. En lugar de seguirles el juego y decir, sí, así es, es una fantasía y no tiene sentido. Una vez que uno consigue interpretarla, puede que sea más satisfactoria, pero es menos divertida.
Las palabras que eligen los periodistas pueden no dar una imagen verdadera del individuo. Por eso no doy demasiadas entrevistas: temo empezar a escucharme a mí mismo hablar. Me pregunto cuánto habrá de mentira en la entrevista, porque no tengo nada que decir acerca de nada. No me interesa analizarme. Lo estoy haciendo ahora mismo y lo considero muy peligroso para un artista.
Altman significa "viejo" en alemán. Y aquí estoy, me he convertido en un Altman. Siempre supe que sería de esta manera, que uno no puede volver el tiempo atrás, soy realista, pero la realidad de todas maneras no tiene por qué gustarme. Cuando quiero alegrarme, recuerdo la canción de Peggy Lee, "Es eso todo lo que hay". Así es la vida, no tiene nada de particular. Tan sólo algo que ocurre.
No sé si escribiría mi autobiografía. No estoy seguro de que mi versión vaya a ser la correcta.

martes, noviembre 21, 2006

Robert Altman: Un Maestro del Cine


El director de cine estadounidense Robert Altman, autor de obras como 'M.A.S.H' y 'El juego de Hollywood', murió el lunes a los 81 años, confirmó este martes su productora a la AFP.
"Bob murió anoche (lunes)", indicó un portavoz de su productora Sandcastle 5 sin dar más detalles de la muerte del cineasta, que según la cadena CNN falleció en un hospital de Los Ángeles. Por el momento se desconocen las causas de su muerte.
Nacido en Kansas City (centro de EEUU) en 1925, siguió en su juventud una temprana vocación militar, entró en una academia militar y se convirtió en piloto de bombarderos en 1945. Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, escribió para varias revistas y cadenas de radio antes de entrar en una productora de cine independiente, medio en el que permanecería el resto de su vida.
Robert Altman, quien este año había recibido el Oscar por su larga trayectoria artística, se caracterizó por marcar su carrera con una visión cínica de la sociedad. "He sido muy afortunado en mi carrera ya que nunca tuve que dirigir una película que no escogí", dijo Altman visiblemente emocionado al recibir este Oscar 2006, el cual dedicó a su esposa.
En sus 55 años de trayectoria, la Academia de las Ciencias y las Artes Cinematográficas lo nominó cinco veces como Mejor Director por 'M*A*S*H' (1970), 'Nashville' (1975), 'El juego de Hollywood' (1992), 'Vidas cruzadas' (1993) y 'Gosford Park' (2001). Además, dos de sus obras, 'Nashville' y 'Gosford Park', ganaron la nominación de Mejor Película.
Prestaba su pluma para la televisión cuando le ofrecieron el guión de 'M*A*S*H', después de que 15 cineastas lo habían rechazado, y con gran sutileza lo convirtió en una comedia crítica del papel de Estados Unidos en Vietnam que dio pie a la famosa serie de televisión. Otro gran éxito llegó con 'Nashville', la historia del incipiente mundo del country. Le siguieron películas como 'Ladrones como nosotros' y 'Tres mujeres', así como el intento fallido de revivir la caricatura de 'Popeye', con Robin Williams, en 1980.
Dio un nuevo giro en 1992 con 'El juego de Hollywood', una cínica sátira sobre las intrigas de la industria cinematográfica, y un año después con 'Vidas cruzadas', un rompecabezas de escabrosas historias que se suceden en Los Ángeles, creando una compleja red de relaciones interpersonales.
Pero en 1994 el público y la crítica rechazó su propuesta sobre el mundo de la moda parisina con 'Pret a Porter'. Se reconcilió con sus seguidores y Hollywood con 'Gosford Park', un agudo estudio del sistema de clases británico con múltiples tramas e intrigas.
"El tipo de películas que los grandes estudios hacen, yo no las quiero. Y el tipo de películas que yo quiero hacer, ellos no saben cómo venderlas", explicó el director hace unos años. "En la gran tienda de Hollywood, ellos venden zapatos y yo hago guantes", afirmó con ironía en una ocasión.
A sus 81 años se encontraba en plena actividad creativa y empezó este año promocionando 'A prairie home companion', con actrices que le fueron fieles en otras obras como Meryl Streep y con un elenco en el que también destacaron Virginia Madsen, Kevin Kline, Tommy Lee Jones y Garrison Keillor, que además de ser guionista del filme, interpretó su propio papel. Su última película fue aclamada en el Festival Internacional de Cine de Berlín, donde la crítica afirmó que el prolífico director ya había empezado a interrogarse sobre la muerte.

Volver de Pedro Almodóvar

El encuentro con una nueva película de Almodóvar supone el encuentro con un nuevo exceso cinematográfico de este genio español. Un nuevo exceso que es también una fiesta para los sentidos. Volver no es la excepción.
Cuando hablo de Almodóvar me gusta recordar la precisión del Jurado del Premio Príncipe de Asturias en su declaratoria: “tanto por la maestría y sinceridad de sus realizaciones, como por la alegría y vitalidad de sus textos y, sobre todo, por la integración de sus raíces, que son las nuestras, en la sociedad de un planeta al borde de un ataque de nervios y a caballo de dos siglos”.
El efecto Almodóvar: mientras más español, más universal. Un auténtico genio.
Con Volver nuevamente nos encontramos con algunas de las claves de su cine:
-Postmodernidad: entendida como la exploración de las posibilidades dramáticas y narrativas del cine. Desde el mismo inicio, Almodóvar integra los créditos de la película como parte del sobrio escenario del cementerio. Volver es una historia que se cuenta a través de los ojos de los personajes: nos sentimos arrastrados por sus sentimientos.
-La oralidad: como sinónimo de la soledad e imposibilidad de efectiva comunicación de sus personajes. En el inicio se le habla a la tumba de la madre y, posteriormente, se visita a la Tía Paula, una Chus Lampreave más despistada que nunca.
-El bolero como detonante melodramático: en Volver se despacha a Penélope Cruz (merecido Premio en Cannes) doblada por Estrella Morante en una magistral versión flamenca del famoso tango de Lepera y Gardel. ¿Alguien se atreve a pedir más?
-Pasión por el cine: las películas de Almodóvar siempre contienen valiosísimas referencias cinematográficas: en Volver es “Bellísima”, el clásico de Luchino Visconti que protagonizó Anna Magnani en 1951.
Finalmente, el propio Almodóvar nos da la fórmula para descifrarlo: “En Volver se habla mucho, pero también se oculta mucho, se escucha mucho y, para ser una comedia, se llora mucho”.

miércoles, noviembre 08, 2006

Enhorabuena al Festival de Cine de Funglode

Desde el próximo 8 de noviembre, Dominicana será la Meca del Cine en el Caribe, gracias a la primera entrega del Festival de Cine de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode) con el “Festival de Cine Global Dominicano” y que atraerá a nuestro país a actores, directores y personalidades de la industria cinematográfica. El festival se propone despertar una mayor conciencia y mejor entendimiento a nivel global e informar y promover la industria en el país.
Bajo el subtítulo de “Temas Globales, Historias Personales”, el encuentro se propone despertar una mayor conciencia y mejor entendimiento a nivel global, a través de las historias de personas y acontecimientos que marcaron la vida de miles de personas.
El Festival de Cine Global Dominicano presenta una selección del mejor cine internacional, documental y dramático, enriquece la cultura cinematográfica del país y lleva el séptimo arte a todos los ámbitos de la sociedad dominicana. El Festival contribuye a una mayor conciencia y comprensión de temas globales a partir de historias sobre eventos y personas que han dejado huella en nuestras vidas. Propicia y fomenta la discusión de temas sociales, políticos y económicos, por medio de la cinematografía.
Entre sus propósitos se busca informar a estudiantes y jóvenes brindándoles las herramientas para desarrollar nuevos proyectos, promover una conciencia de cambio constructivo a nivel social, y ofrecer los encantos tanto urbanos como naturales de República Dominicana para los cineastas de todo el mundo.Como parte del programa, también se desarrollarán una serie de actividades educativas que crearan la posibilidad de interacción y enriquecimiento mutuo entre todos los participantes. La organización ha previsto reunir un público de diferentes estilos de vida, pensamiento y cultura. Para ello, se realizarán presentaciones, talleres y paneles de discusión, tanto con actores y directores, como líderes y miembros de la industria cinematográfica.Lo más importante: los beneficios del Festival no sólo se quedarán en Santo Domingo, sino que llegará a Santiago y Puerto Plata, en sus respectivas sedes de la UASD.Ya lo dije en el título: ¡Enhorabuena!

martes, octubre 31, 2006

Festival de Cine Internacional de Funglode

El Festival de Cine Global Dominicano” se realizará desde el 8 hasta el 12 de noviembre próximos con actores, directores y personalidades de la industria cinematográficaSe destacan las presencias del actor y director Andy García, los actores Enrique Murciano, Néstor Carbonell, Steven Bauer, Joseph Drago, Juan Fernández, Gonzalo Menéndez y la actriz Dominik García-Lorido, entre otras figuras invitadasEl festival se propone despertar una mayor conciencia y mejor entendimiento a nivel global e informar y promover la industria en el país
Miami, FL, 19 de octubre del 2006.- En noviembre, Republica Dominicana abrirá sus puertas a lo mejor de la cinematografía mundial con el “Festival de Cine Global Dominicano”. Desde el 8 hasta el 12 de noviembre próximos, la isla del Caribe recibirá a las más destacadas personalidades del cine así como las últimas propuestas de películas y documentales.El festival, que se extenderá durante cinco jornadas, es organizado por Global Foundation for Democracy and Development (GFDD) www.globalfoundationdd.org y la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE) http://www.funglode.org/FunglodeApp/. Bajo el subtítulo de “Temas Globales, Historias Personales”, el encuentro se propone despertar una mayor conciencia y mejor entendimiento a nivel global, a través de las historias de personas y acontecimientos que marcaron la vida de miles de personas.Entre sus propósitos se busca informar a estudiantes y jóvenes brindándoles las herramientas para desarrollar nuevos proyectos, promover una conciencia de cambio constructivo a nivel social, y ofrecer los encantos tanto urbanos como naturales de República Dominicana para los cineastas de todo el mundo.Como parte del programa, también se desarrollarán una serie de actividades educativas que crearan la posibilidad de interacción y enriquecimiento mutuo entre todos los participantes. La organización ha previsto reunir un público de diferentes estilos de vida, pensamiento y cultura. Para ello, se realizarán presentaciones, talleres y paneles de discusión, tanto con actores y directores, como líderes y miembros de la industria cinematográfica.El nacimiento de este festival fue inspirado por el actual Presidente de la República Dominicana, Leonel Fernández, quien es además el Fundador y Presidente Honorario de las fundaciones FUNGLODE/GFDD, organizadoras del evento. Entre otras figuras de la industria, estarán presentes el actor y director Andy García, los actores Enrique Murciano, Néstor Carbonell, Steven Bauer, Joseph Drago, Juan Fernández, Gonzalo Menéndez y la actriz Dominik García-Lorido.El evento comenzará oficialmente con la presentación de “The Lost City”, la película dirigida por Andy García, el miércoles 8 de noviembre en el prestigioso Teatro Nacional y continuará inmediatamente con una gala de apertura.

viernes, octubre 20, 2006

El Cine Dominicano en el 2006

El Cine Dominicano, en los últimos años, ha experimentado un renacer que todos anhelamos que sea definitivo. Hace mucho que los dominicanos hemos importado los sueños que los dólares nos permiten comprar. Pero los dominicanos también soñamos con un cine propio: un cine que nos represente como somos, con nuestros aciertos y nuestras contradicciones, con nuestros excesos y nuestras maravillas, con nuestros defectos y esa magia que habita en nuestro Caribe.
El 2006 arrancó bien temprano para el cine dominicano: el 9 de febrero se estrenó Un macho de mujer de Alfonso Rodríguez y con un elenco encabezado por Roberto Angel, Jochy Santos y Ana Karina Casanova. Esta comedia tuvo muy buena acogida del público y permaneció varios meses en cartelera.
El 26 de julio se estrenó Lilís, primera película de recreación histórica que se hace en Dominicana y que retrata el período de la dictadura del General Ulises Heureaux. Dentro del elenco de Lilís están: Juan María Almonte y Franklin Domínguez bajo la dirección de Jimmy Sierra. Muy poco respaldo de la críti ca y del público provocó que sólo estuviera 3 semanas en cartelera.
El 31 de agosto se estrenó Viajeros, de Carlos Bidó con un elenco que incluye a: Sergio Carlo, Nashla Bogaert y María Ligia Grullón. Esta película es vista como un apreciable salto cualitativo en términos de su realización y fue estrenada simultáneamente en Nueva York y Puerto Rico. Pero tampoco contó con el respaldo de la crítica y el público no fue todo lo entusiasta que se esperaba.
La Tragedia Llenas, filme dirigido por Elías Acosta y basado en la novela del mismo nombre, fue estrenado el 28 de septiembre. La crítica ha despedazado esta película por su flojo guión, a pesar de que recrea uno de los sucesos más dramáticos de los últimos años en el país. El elenco lo encabezan Frank Perozo y Sharlyn Taulé y el público tampoco ha asistido masivamente a las salas de cine.
Mucha gente se pregunta ¨¿Qué pasa con el Cine Dominicano?¨. Evidentemente hay que analizar algunos de los factores para 3 de los 4 estrenos del 2006 no hayan tenido masivas acogidas. La crítica especializada ha sido muy implacable con ellas pero, al margen de eso, hay una verdad irrefutable: esas películas no han gustado a la gente.
Cualquiera de los estrenos del 2006 tiene serios problemas en más de un aspecto de su producción, pero creemos que una de las mayores deficiencias a mejorar son los guiones sobre los cuales se han levantado los proyectos. Un axioma cinematográfico muy respetado es aquel que señala que de un buen guión puede salir una buena película, pero de un guión malo es prácticamente imposible que se logre un filme de calidad.
Muchos ven con preocupación el panorama en el entendido de que el público puede cansarse de que no le presenten películas que sean de su agrado, esto al margen de que sean comedias o dramas, y que termine desestimando cualquier propuesta cinematográfica dominicana y comprando su taquilla para cualquier clavo norteamericano, aún los rodados en Dominicana.
Pongo tres ejemplos: La fiesta del chivo, dirigida por Luis Llosa; Miami Vice, dirigida por Michael Mann y estelarizada por Colin Farrel, Jamie Fox y Gong Li; y The Lost City, una producción del conocido Andy García con libreto de Guillermo Cabrera Infante

jueves, septiembre 21, 2006

En las películas de Eliseo Subiela

En las películas de Eliseo Subiela late el constante cuestionamiento existencial de los sobrevivientes de las metrópolis de nuestros días, acaso unánime aventura de sacudirnos ante tanto desporpósito y soledad.
Por eso, todos terminamos hipnotizados en la eterna lucha entre el amor y la muerte, entre el azar y el destino.
En las películas de Eliseo Subiela siempre aparecen mujeres-ángeles, ya sean etéreas como en No te mueras sin decirme dónde vas, o voluptuosas y carnales como en El lado oscuro del corazón.
En las películas de Eliseo Subiela sus personajes están atrapados por la nostalgia. Y se valen de los poemas como recurso para evocar un pasado mejor que nos marca para siempre y nunca terminamos de olvidar.
En las películas de Eliseo Subiela la poesía visual también está presente y nos convierte en cómplices de sus travesuras con aires post-modernos. Por eso preferimos jugar con él a ser los Peter Pan, multiplicados como en el milagro bíblico.
En las películas de Eliseo Subiela late desnuda esa intención de redimirnos por encima de nuestras limitantes y, a pesar de todos los pesares, celebrar la alegría de vivir.
Eliseo Subiela con su cine poético y filosófico, sentimental y postmoderno, nos habla a los corazones. Y es imposible no escuchar ese llamado.

miércoles, julio 12, 2006

Una aproximación al Universo Julio Medem

El escenario del cine español contemporáneo reconoce, al menos, a un gran gurú (Pedro Almodóvar), dos talentos consolidados (Julio Medem y Alejandro Amenábar) y una nueva promesa (Fernando León de Aranoa).

Los nuevos talentos pertenecen a una misma generación cinematográfica, lo que ha permitido a los cinéfilos más diletantes las siempre injustas comparaciones, el necesario enfrentamiento de propuestas.

Alejandro Amenábar responde a una sólida formación y conocimiento de la gramática cinematográfica y hace una propuesta más clásica, más acorde con los estándares del cine tradicional. Con ello, ha logrado un éxito comercial extraordinario. Con el Oscar a su maravillosa Mar adentro, el mundo de la crítica se ha rendido a sus pies.

Julio Medem, de su lado, responde a las nuevas corrientes, enfrenta en su cine las búsquedas de nuevos significados cinematográficos, experimenta con las formas, es más osado. También ha conocido el éxito comercial.

Pero quiero dejarlo bien claro: es mi nuevo talento favorito, siempre simpatizo por esa vocación de aiskolari suicida que se atreve con proyectos de Quijote, que nos abre el pecho de un hachazo y nos muestra los enigmas de nuestras almas.

Y lo mejor: su cine responde a una serie de claves, de particulares obsesiones, de las que están impregnadas sus películas.
Aquí van algunas:

La circularidad. Lo circular (o esa percepción) bordea todo el universo Medem. Desde el globo ocular, que nos permite llegar al interior de sus vacas, hasta el mismísimo Círculo Polar Artico, escenario de su mejor película.
El sexo, como generador de las acciones de los personajes y de situaciones de violencia.
La casualidad. Esa visión del peso del destino o del azar sobre sus personajes.
La atmósfera. Sus personajes siempre son víctimas de su entorno natural: en Vacas del bosque, en Tierra del viñedo; y
El amor, necesario ingrediente para llenar de color nuestra existencia.

Por suerte, faltan muchas claves por descifrar y eso requiere de la activa participación de los cinéfilos cuando callan (y apagan sus celulares) para iniciar ese viaje maravilloso a uno de los universos más ricos del cine español: Julio Medem.