miércoles, julio 09, 2008

Kung Fu Panda, lo nuevo de Dreamworks

Hasta hace unos años, Disney era un monopolio en el mercado de cine de animación. El logo de Disney (recientemente remozado) implica de forma automática para muchos padres un sello de garantía de que el contenido de un filme es apropiado para toda la familia.
Disney nuevamente impuso el dibujo animado (ahora diseñado en computadoras) como un aliado natural para conquistar un importante segmento del mercado cinematográfico de verano.
Efectivamente, con La sirenita (1989) consiguieron 109 millones de dólares en taquilla y despertaron la envidia ajena. El colmo del éxito fue La bella y la bestia (1991), la primera película de animación en recibir un Globo de Oro como Mejor Película y ser nominada al Oscar compitiendo con películas de acción real (perdió de El silencio de los inocentes).
Ya era demasiado. La 20th Century Fox lo intentó en 1997 con Anastasia, pero desistieron ante los pobres resultados. Eso mismo año, Steven Spielberg, David Geffen y (mucha atención, el ex-jefe de Disney) Jeffrey Katzenberg fundaron la productora Dreamworks.
Apenas un año después presentaron credenciales con: Hormigas y El Príncipe de Egipto. El resto es historia: Shrek, Madagascar y Bee Movie, incluídas.
Ahora nos llega Kung Fu Panda y hay que señalar de entrada que se trata de uno de los filmes más agradables del año.
Ese tono burlón con relación al mundo místico de las artes marciales la convierte en una película que disfrutan los niños por sus fabulosas secuencias de acción y sus muchos gags, y sus padres también, acaso sobrevivientes de la época dorada de Bruce Lee.
No hay ideas rebuscadas, sólo se trata de pasar un buen rato. Y dejar bien clarito un mensaje: cuando se quiere, se puede.
Como el nombre la compañía productora: los sueños funcionan. Es cuestión de definir objetivos, afinar talento y ponerle empeño.

1 comentario:

Félix Manuel Lora AnaBélgica Guichardo Maribel Jiménez Lisania Batista dijo...

Definitivamente, en el mercado del animado en los EEUU, se ha producido un fenómeno de reevaluación en la repartición del pastel de ganancias. La otrora supremacía de Disney, es ya cosa del pasado. Cuando los talleres de Pixar iniciaron la gran revolución del animado en 3D con "Toy Story", utilizando la plataforma comercial de Disney, esto hizo pensar a la reina del animado en optar por esta nueva tecnica e hizo cerrar sus estudios de la animación tradicional.
Se agradece a Spielberg tomar también la iniciativa en el negocio y hoy el público puede tener mejores opciones de productos. "Kung Fu Panda" responde a esto y, con razón, la DreamWorks ha logrado posicionarse con buen pie en el mercado.