La directora Liliana Cavani y el actor Tony Leung Chiu-wai recibirán cada uno un León de Oro a la Trayectoria en el 80º Festival Internacional de Cine de la Biennale di Venezia, que se celebrará del 30 de agosto al 9 de septiembre.
La
decisión fue tomada por la Junta Directiva de La Biennale, por recomendación
del Director del Festival, Alberto Barbera.
“Estoy
muy contenta y agradecida con la Biennale di Venezia por esta maravillosa
sorpresa”, dijo Liliana Cavani al aceptar el premio. La directora se dio a
conocer en Venecia en 1965 con Philippe Pétain: Processo a Vichy,
León de San Marco al mejor documental, seguido de Francesco d'Assisi (1966),
Galileo
(1968), I cannibali (1970), Il gioco di Ripley (2002) y Clarisse
(2012).
Tony
Leung Chiu-wai, que protagonizó tres películas que ganaron el León de Oro en el
Festival Internacional de Cine de Venecia: A City of Sadness (1989) de Hou
Hsiao-hsien, Cyclo (1995) de Tran Anh Hung y Lust, Caution (2007) de
Ang Lee, al aceptar el premio, declaró: “Estoy abrumado y honrado con las
noticias de la Biennale di Venezia. Espero celebrar este premio con
todos los cineastas con los que he trabajado. Este premio es un homenaje a
todos ellos también”.
Sobre el premio a Liliana Cavani, el director del
Festival, Alberto Barbera, declaró: “Una de las protagonistas más emblemáticas
del Nuevo Cine Italiano de los años 60, cuya obra abarca más de sesenta años de
historia del espectáculo, Liliana Cavani es una artista polifacética que
frecuenta la televisión, el teatro y la ópera con el mismo espíritu poco
convencional y fermento intelectual que han hecho famosas sus películas. Su
mentalidad siempre ha sido inconformista, libre de prejuicios ideológicos y
desvinculada de cualquier tipo de lavado de cerebro; lo impulsa la búsqueda
constante de una verdad escondida en los rincones más recónditos y misteriosos
del alma humana, hasta el borde de la espiritualidad. Los personajes de sus
películas están ambientados en un contexto histórico que muestra una tensión
existencial hacia el cambio, jóvenes en busca de respuestas a preguntas
importantes, personajes complejos y problemáticos que reflejan el conflicto no
resuelto entre el individuo y la sociedad. La suya es una mirada política en el
más alto sentido del término, antidogmática, no alineada, valiente en su forma
de enfrentar hasta los tabúes más desafiantes, ajena a las tendencias,
resistente al compromiso y al oportunismo productivo. En cambio, está abierta a
una ambigüedad fértil en los personajes y situaciones que presenta. Una lección
fecunda tanto de estética como de ética, de un protagonista de nuestro cine que
define su perpetua modernidad.”
Al
comentar sobre el premio de Tony Leung Chiu-wai, Barbera declaró: “Tony Leung
es un artista carismático en el curso de una carrera transnacional excepcional
que ha evolucionado paralelamente a la expansión de la circulación mundial de
películas. Los papeles de Tony Leung no sólo han abarcado una gran variedad de géneros,
sino que también han tendido un puente entre la televisión, la cultura popular
y el arte-cine en diferentes latitudes. Su reputación está estrictamente ligada
a su colaboración a largo plazo con aclamados autores galardonados,
personificados por su inolvidable actuación en In the Mood for Love
(2000) de Wong Kar-wai, que le otorgó el premio al Mejor Actor en el festival
de cine de Cannes. Sus papeles protagónicos en tres películas galardonadas con
el León de Oro de Venecia de diferentes partes de Asia también confirman su
centralidad en el cine de autor. Sin embargo, su perfil mundial también
está afiliado a éxitos de taquilla que abarcan diferentes modos, géneros e
idiomas, incluidos Hero de Zhang Yimou (2002), Infernal Affairs de
Andrew Lau y Alan Mak (2002-03), Red Cliff de John Woo (2008 -09), y
la película de Marvel Shang-chi and the Legend of the Ten Rings
(2021). Reconocido como uno de los principales actores de su generación,
mientras mantiene la increíble versatilidad que lo convirtió por primera vez en
una estrella de cine y pop en Hong Kong en la década de 1980, ha logrado un
perfil único como estrella panasiática y mundial que confirma su presencia.
dentro de culturas cinematográficas en constante cambio, deconstruyendo la idea
tradicional del estrellato masculino y aportando una sensibilidad irresistible
a todos sus papeles”.
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