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viernes, febrero 05, 2021

Christopher Plummer (1929-2021)

 


El legendario actor Christopher Plummer, cuya extensa carrera incluye inolvidables interpretaciones, falleció en su casa de Connecticut a los 91 años de edad. Uno de los actores más amables, considerados y galantes. Plummer, actor de Shakespeare, nació en Canadá y protagonizó películas inolvidables como The Sound of Music y Beginners.

“Chris era un hombre extraordinario que amaba y respetaba profundamente su profesión con excelentes modales a la antigua, un humor autocrítico y la música de las palabras”, dijo Lou Pitt, su viejo amigo y mánager durante 46 años. “Era un tesoro nacional que disfrutaba profundamente de sus raíces canadienses. A través de su arte y humanidad, tocó nuestros corazones y su vida legendaria perdurará para todas las generaciones venideras. Él estará para siempre con nosotros”.

Con un físico impresionante y una potente voz, Plummer comenzó cultivándose en el teatro, como dijo una vez el crítico John Simon. “Su estilo suave, puede pulir los espejos». De hecho, consiguió dos premios Tony sobre el escenario de Broadway; uno por Cyrano en 1974 y el segundo en 1996 por Barrymore.

Sin embargo, no fue el teatro lo que le dio fama y éxito, sino interpretar al Capitán Von Trapp en el musical ganador del Oscar The Sound of Music.

Plummer ganaría también un Oscar como mejor actor secundario por su papel en la cinta Beginners, convirtiéndose en el actor de más edad en ganar el premio de la Academia. Sin dejar de trabajar, a pesar de superar los ochenta, Plummer destacó en la última etapa de su carrera por «Puñales por la espalda», «Doce monos», «Una mente maravillosa» y por sustituir a Kevin Spacey en «Todo el dinero del mundo interpretando» al magnate Paul Getty en la cinta de Ridley Scott.

En sus últimos años participó en personajes y papeles secundarios, incluida su interpretación del periodista Mike Wallace en la película de Michael Mann «El dilema» y como Franklin Delano Roosevelt en la cinta para HBO «Winchell: Cronista de sociedad», dirigida por Paul Mazursky. También logró un Emmy por su interpretación en la miniserie «Traficantes de dinero» y otro por su narración del especial infantil «Madeline».

Nacido Arthur Christopher Orme Plummer en Toronto, creció en Montreal, donde asistió a la Jennings Private School. Hizo su debut en el escenario en una producción de 1948 de Cymbeline con el Canadian Repertory Theatre en Ottawa, seguida poco después por una producción televisiva de CBC de Othello. A principios de los 50 emigró a Nueva York, donde trabajó extensamente en televisión en vivo en programas como Kraft Television Theater, Hallmark Hall of Fame, Producer 's Showcase, Appointment With Adventure y Omnibus.

Su debut en Broadway se produjo junto a Katherine Cornell en «The Starcross Story» de 1954. Al año siguiente, Judith Anderson fue su coprotagonista en una producción parisina de Medea, y el mismo año apareció como el conde de Warwick con Julie Harris en una producción neoyorquina de «The Lark» de Jean Anouilh. También apareció en J.B. de Archibald Macleish, dirigida por Elia Kazan. Los críticos lo descubrieron cuando protagonizó a Henry V en el Festival de Stratford en 1956. Fue el primer canadiense elegido por Tyrone Guthrie para liderar una producción, y el crítico de «Los Angeles Times» escribió: «Antes de Plummer, Stratford contó principalmente con actores ingleses como Alec Guinness y James Mason. Desde este momento, Plummer está por encima de ellos». Fue tal la locura de los críticos de teatro que muchos creían que Plummer era en realidad británico y no canadiense. Adivinando el futuro, el actor continuó trabajando en la televisión inglesa interpretando papeles como «Hamlet» (1957).

Debutó en el teatro de Londres con Becket en 1961 como Enrique II, papel que le valió el premio London Evening Standard. El debut cinematográfico de Plummer se produjo en «Stage Struck» de Sidney Lumet en 1958. Pero «Sonrisas y lágrimas», de 1965, fue su película más vista hasta la fecha, aunque él tenía poco respeto por «The Sound of Mucus» (el sonido de los mocos), como él la llamaba en inglés, y su voz fue doblada en los números musicales. Trabajó de manera constante durante esa década en «La caída del Imperio Romano», «La noche de los generales» y en «Inside Daisy Clover», pero calificó la mayoría de ellas como «horribles». Se sintió algo mejor con el estreno en 1968 de Oedipus the King y la versión cinematográfica de «La caza real del Sol».

A mediados de los sesenta, le dijo una vez a la revista «Ageless», que había fracasado en sus dos matrimonios por su descontrolada forma de beber, pero con la ayuda de su tercera esposa, la ex actriz británica Elaine Taylor, resucitó su carrera. En 1973 concibió y dirigió la obra inspirada en temas de Shakespeare «Lovers and Madmen», junto a Zoe Caldwell, y al año siguiente obtuvo un Tony por el musical «Cyrano». Participó como Rudyard Kipling en la película de John Huston «El hombre que pudo reinar» (1975) y como Sherlock Holmes en la película de 1980, «Asesinato por decreto». Durante este período ganó un Emmy en la miniserie de NBC «Traficantes de dinero» (1976) y protagonizó la producción televisiva de Paul Newman de «La caja oscura» en 1980.

Cuando Plummer regresó a Broadway en 1982, el crítico del «New York Times» Walter Kerr calificó su Iago como «posiblemente la mejor interpretación de Shakespeare que se haya producido en este continente en nuestro tiempo». Realizó una gira por el país con una producción de Macbeth junto a Glenda Jackson en 1988 y apareció en papeles secundarios en películas importantes de la cultura pop como «Doce monos», «Star Trek VI: aquel país desconocido» (a la que prestó un tenue aire shakesperiano) y «Dolores Claiborne». Trabajó de manera constante para la televisión a principios de los noventa, protagonizando la serie «Contragolpe». A lo largo de la década, Plummer no mostró signos de desaceleración, marcando su nombre en los créditos continuos de más de veinte filmes. Apareció en «Cold Creek Manor», «National Treasure», «...Y que le gusten los perros», «Syriana» y «Plan oculto», pero también mostró sus músculos como actor en cintas de época como «El nuevo mundo» de Terrence Malick.

Incursionó en dramas románticos como «Cerrando el círculo» y «La casa del lago», y recibió el reconocimiento de la crítica cuando asumió el papel principal de Flash Madden en «Man in the Chair» en el 2007.

Uno de los papeles más memorables de Plummer con la llegada del milenio involucró sólo a su voz. En la conmovedora película animada de Pixar «Up», donde interpretó a Charles Muntz, un anciano con la misión de hacer realidad el sueño de su difunta esposa. Al cerrarse la primera década del milenio, Plummer apareció en «El imaginario del Doctor Parnassus», la última cinta de Head Ledger, pero fue su papel como el autor León Tolstói en «La última estación» lo que le valió una nominación al Oscar como mejor actor de reparto. Plummer se sumergió en otros géneros, incluida la acción, en cintas como «Millennium: los hombres que no amaban a las mujeres» pero sorprendió y deleitó a los críticos como Hal, un anciano y padre enfermo de cáncer que acababa de salir del armario, en «Beginners», por la que ganó un Oscar.

Estuvo casado tres veces, la primera con la actriz Tammy Grimes, con quien tuvo una hija; la segunda con la periodista Patricia Audrey Lewis; y la tercera con la actriz y bailarina Elaine Taylor.

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